Prof. La’Meshia Whittington

Descendiente del linaje real del Reino de la Tierra Feliz —asentamiento afroindígena surgido tras la emancipación y enclavado en lo más profundo de los montes Apalaches de Carolina del Norte y Carolina del Sur, Estados Unidos—, La’Meshia Whittington ha preservado las tradiciones de su pueblo y de su abuela, la filántropa Rebecca Staley, al servicio de la gente.

Cuestionadora de las perjudiciales desigualdades sistémicas que asolan a las comunidades de color marginadas y en primera línea, y a las poblaciones con escasos recursos en general, La’Meshia es una visionaria del tren subterráneo de la ecoliberación y el cambio sistémico con miras a acabar con la opresión de la contaminación heredada de las comunidades negras; eliminar las desigualdades en materia de salud creadas en las poblaciones socioeconómicamente desfavorecidas a las que suelen enviarse los residuos, y defender la autonomía y soberanía de comunidades poderosas en la región sur y el Sur Global de Estados Unidos.

La’Meshia Whittington es la ecoarquitecta. Perteneciente a la generación de los “milenials”, Whittington cofundó Democracy Green junto con su familia: la cofundadora y directora ejecutiva, Sanja Whittington, y el cofundador de GenZ, Robert Whittington Jr. Nacida a raíz de las inundaciones provocadas por el huracán Florence, Democracy Green es una organización sin ánimo de lucro dirigida por líderes afroindígenas y negros que lucha por la justicia ambiental y la reforma por la democracia.

Por conducto de Democracy Green, Whittington coordinó más de 250 rescates acuáticos y terrestres en el este de Carolina del Norte; recaudó más de dos millones de dólares por concepto de asistencia solidaria de emergencia; fue la primera presidenta del fondo comunitario que prestó asistencia en múltiples catástrofes y a todo lo largo de la pandemia por COVID-19, y organizó la entrega de un tráiler con más de once toneladas de suministros básicos de emergencia a residentes de Florida tras el paso del huracán Michael.

Desde entonces, Democracy Green ha ayudado a comunidades a recibir fondos federales para infraestructura hídrica, incluida recientemente una subvención de 13.2 millones de dólares destinada a desarrollar una infraestructura de agua limpia por primera vez en la historia de una comunidad negra no-incorporada.

También por medio de su organización y como asesora de financiamiento, Whittington ha apoyado el flujo directo de más de 75 millones de dólares a comunidades de todo el sur de Estados Unidos desde la pandemia mundial.

El gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, nombró a la profesora Whittington integrante de la Junta de Certificación de Tratamiento de Aguas de Carolina del Norte; asimismo, fue de nuevo designada integrante del Consejo Consultivo sobre Justicia y Equidad Ambientales del Departamento de Calidad Ambiental de Carolina del Norte por la titular Elizabeth Biser. En 2024, la Agencia de Protección Ambiental (Environmental Protection Agency, EPA) de Estados Unidos la nombró miembro del Comité Consultivo de Gobiernos Locales (Local Government Advisory Committee, LGAC). Además, fue seleccionada como jueza del primer Tribunal de Derechos de la Naturaleza dirigido por comunidades indígenas del país, con la encomienda de abordar las repercusiones del oleoducto Mountain Valley Pipeline.

Whittington llevó a cabo la primera investigación del país en torno a la práctica racial conocida como gerrymandering (manipulación de distritos electorales) y los puntos álgidos de contaminación en comunidades marginadas, y posteriormente estudió también la intersección entre los sulfonatos de perfluoroalquilo (SPFA) y la justicia ambiental. Asimismo, por encargo de instancias estatales y organizaciones sin ánimo de lucro, publicó estudios sobre el impacto de los pellets de madera y las comunidades con problemáticas de justicia ambiental. Su trabajo sobre contaminantes emergentes llevó a Democracy Green a iniciar, llevar con éxito y ganar una petición ante la EPA de Estados Unidos, en la que se ponen en tela de juicio los principales contaminantes en su estado natal, Carolina del Norte.

El trabajo de Whittington fue decisivo en el diseño de la hoja de ruta de los SPFA (en inglés, PFAS) de la EPA; la designación de estos compuestos químicos como sustancias peligrosas, y la elaboración de las primeras normas nacionales en materia de agua potable relativas a los SPFA. Sus investigaciones se recogen en las primeras directrices clínicas del país sobre pruebas de SPFA, elaboradas para los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (Centers for Disease Control and Prevention, CDC).

Vicejefa de la Banda Oriental de los Apalwahči —colectivo afroindígena—, Whittington ejerce como profesora adjunta de diversidad y justicia ambiental en el Colegio de Estudios Superiores y Tecnológicos de Recursos Naturales de la Universidad Estatal de Carolina del Norte. Fue nombrada heroína del cambio climático 2022 por ABC11; distinguida con el premio Our America: Green Guardians de ABC6; integrada en la lista Grist50 Fixer de la Iniciativa Global Clinton, y seleccionada líder juvenil en sustentabilidad hídrica del Foro Mundial del Agua 2024.